AUTOBIOGRAFÍA

Jose
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Mi nombre completo es Sandra Andrés Medina, nací en el mejor año, 2010, era una de las personas más pequeñas de mi clase, junto a un viejo amigo Juan Miguel, yo nací el 11 de diciembre y él el 12 de diciembre. Ahora mismo tenemos 79 años mientras que el resto de compañeros que estarán por el mundo perdidos tienen 80 (muy injusto). Mis padres se llamaban Juana de la Corte y Pepe Cruz. Lo que más me gusta de ellos es que tienen 139 años los dos y siguen saliendo a la calle, y viven su vida normal.

Tuve una infancia muy alocada, pero divertida. Mis antepasados eran muy ricos, sin embargo, mi familia no es tan rica, era una familia normal, con no millones de euros, pero tampoco tres céntimos, era y es una familia intermedia. Sobre todo, mis antepasados eran ricos por una tienda de mi abuela (Mely), que se llamaba “Los Peques’’. Y también con mi tatarabuelo, que era cónsul en Italia. Tengo cinco hermanos mayores más que yo, el que más me molestaba, era el del medio, se llamaba Jorge, por su culpa todos los días me castigaba. A veces te quiero a siempre te odio, eso era así.

Desde que era muy pequeña, me gustaba el balonmano, mis padres me apuntaron a un club, me gustó y me dijeron que era muy buena, yo no pensaba así, pero parece que sí que tenían razón, me llamaron para muchos campeonatos, de Córdoba, Andalucía, España e incluso de todo el mundo. En el campeonato de todo el mundo, fui a los 12 años, conocí a una jugadora de Francia, que me seguía a todos lados, al fin y al cabo, nos hicimos amigas, muy buenas amigas, se llamaba Alexandra,tanto que me fui a vivir junto a ella en Francia, en la “familia’’ éramos: ella, su madre, su padre y yo. Viajaba todos los meses mínimos tres veces para visitar a mi familia. Crecimos juntas. Pero a los 19 años me volví a España con mi familia y estudie en la universidad de medicina, fui una estudiante excelente así que termine la carrera en tres años, mientras estudiaba, seguí jugando al balonmano. Termine trabajando como la mejor cirujana de huesos en uno de los diez mejores hospitales del mundo, que estaba en Barcelona. Salve millones de vidas. Me ascendieron a jefa, es decir la dueña del hospital, además de eso también operaba. Me decían que era una de las mejores cirujanas del país. Estaba muy orgullosa de todo mmi esfuerzo que tuve que hacer para estar en esa situación. Mientras que trabajaba seguí jugando al balonmano, y estaba en el Barça. Gané muchas copas junto a mi equipo el Barça. Me retiré del balonmano a los 36 años, porque era bastante mayor para continuar. Me hicieron un homenaje, que no se me olvidará en la vida.  Seguí en el hospital operando y salvando vidas (todas las posibles), unos años más tarde tuve cuatro seis hijos junto a mi marido Carlos. Todo nos fue de maravilla. Continué en el hospital hasta los 65 años, que me jubilé. Todo el hospital me hizo una fiesta de despedida, pero yo vi a alguien que sabía que no trabajaba en el hospital. Me quede mirándola durante 5 minutos, pero no sabía quién era, hasta que me fije que era Alexandra, mi antigua “hermana’’. Le pregunte si era ella, y sí era. Nos quedamos hablando toda la fiesta. Cuando todo acabó la convencí y se mudó al piso que está enfrente mía. Ella estaba casada y con seis hijos, vivimos nuestras vidas normales, pero siempre juntas, y ahora estamos las dos igual que antes y de bien, pero con 80 años. Durante toda mi vida, yo tuve un lema, que decía: Todo es imposible, hasta lo que el mundo piense que es imposible, o este comprobado, da igual todo es posible.

Autora: Sandra Andrés Medina

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